sábado, 6 de enero de 2018
El Bautismo del Señor
Este domingo del Bautismo del Señor es frontera entre el Tiempo de Navidad y el Tiempo Ordinario. Es, además, el final de celebraciones navideñas. En el Bautismo se centra el misterio de nuestra vida: el pasado del pecado, el presente de hombres y mujeres nuevos con toda la esperanza ante la salvación. Hoy podíamos aprovechar para pedir al Señor que la gracia de que nuestro bautismo cale en nuestra vida, y seamos luz para los que nos rodean. Todos estamos llamados a insertarnos y dar fruto en la Iglesia por medio del bautismo. Y, asimismo, tomar conciencia de que la tarea de todo bautizado es: vivir siendo signo, siendo luz; desterrar toda injusticia, buscar la hermandad entre los hermanos y ayudar a construir un mundo nuevo donde reine la paz y el amor. Es una bella tarea para meditar a lo largo del día hoy… y para todos los días.
El Bautismo del Señor
7 de enero de 2018
Misa Familiar
**Idea: En el Bautismo Jesús inicia su misión
7 de enero de 2018
Misa Familiar
**Objetivo: descubrir que, su misión, es también la nuestra
1. MONICIÓN DE ENTRADA
Bienvenidos a esta Eucaristía. ¿Qué tal estamos? ¿Cómo han ido las celebraciones de la Navidad? ¿Hemos sentido la venida, la presencia y el amor de Dios en Belén?
Hoy, con este domingo, comenzamos a seguir –muy de cerca- los pasos de Jesús. Y, su caminar, se inicia con su Bautismo a manos de Juan Bautista en el río Jordán. Vivir con Dios, es desvivirse por El; hablar de Dios, es sentir su amor y su cercanía.
Hoy, en el Bautismo del Señor, Jesús recibe la autoridad, la confianza máxima por parte de Dios: es su Hijo amado, el preferido…el que ha de llevar a cabo su obra en la tierra.
Hoy, por lo tanto, estamos de fiesta en nuestra Iglesia: ¡ES EL BAUTISMO DE AQUEL QUE NACIO EN BELÉN!
Nos ponemos de pie y cantamos.
2. PETICIONES DE PERDÓN
2.1. Un día, también nosotros, fuimos bautizados. ¿Recordamos o nos recuerdan ese momento para ser mejores amigos de Cristo? Señor, ten piedad
2.2. Un día, también nosotros (en el río Jordán que es la pila bautismal) Dios nos dijo que éramos sus hijos amados y preferidos: ¿Es Dios también lo que más queremos en nuestra vida? Cristo, ten piedad
2.3. Un día, como a Jesús, el cielo también se abrió para darnos una fuerza especial para ser cristianos. ¿La guardamos a través de la oración, la eucaristía, la caridad o el perdón? Señor, ten piedad
3. MONICIÓN A LAS LECTURAS
Las lecturas que vamos a escuchar nos preparan a la misión de Jesús: Isaías indica cómo será el Mesías. La segunda lectura, por otro lado, nos presenta un conjunto de enseñanzas sobre el papel que va a desempeñar el Salvador. Finalmente, aunque brevemente, el Evangelio nos narra la complacencia, la alegría, la satisfacción que tiene Dios en un Hijo que va a ser su voz, sus pies, sus manos y su corazón en la tierra. Escuchemos con atención.
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PRIMERA LECTURA
LECTURA DEL LIBRO DE ISAÍAS 42, 1-4.6-7
SALMO RESPONSORIAL
SALMO 28
R.- EL SEÑOR BENDICE A SU PUEBLO CON LA PAZ
SEGUNDA LECTURA
LECTURA DEL LIBRO DEL HECHO DE LOS APÓSTOLES 10, 34-38
ALELUYA
Los cielos se abrieron y se oyó la voz del Padre: Este es mi Hijo, el Amado, escuchadlo
EVANGELIO

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4. ORACIÓN DE LOS FIELES
4.1. Por la Iglesia, en la cual hemos recibido nuestro Bautismo. Para que el Papa, los Obispos, los sacerdotes y todos los que colaboran con ella, se abran a la fuerza que nos trae el Espíritu. Roguemos al Señor.
4.2. Por todos los que, en el presente año, van a ser bautizados. Por sus padres y padrinos. Para que se comprometan más activamente y con más entusiasmo en los frutos del bautismo: la vida cristiana de la familia y de sus hijos. Roguemos al Señor.
4.3. Como el Señor, también nosotros somos amados y elegidos por Dios. Para que respondamos a ese amor con más amor, a esa elección dando pruebas de que somos cristianos. ¡Que se note! Roguemos al Señor.
4.4. Como todos los que se bautizaban con Juan Bautista, tenemos pecados y faltas personales. Para que no olvidemos que, agarrándonos a Dios, podemos mejorar y revisar nuestra vida en este año que hemos comenzado. Roguemos al Señor.
4.5. Para que el Bautismo de Jesús nos haga preguntarnos sobre el nuestro. ¿Quién me bautizó? ¿Cuándo? ¿Qué sacerdote? ¿Quiénes fueron mis padrinos? ¿Soy cristiano de verdad? Roguemos al Señor.
5. OFRENDAS
5.1. Con esta jarra de cristal, a rebosar de agua, presentamos al Señor nuestro deseo de ser limpios en nuestros juicios y en nuestras miradas. Le damos las gracias porque, recibirle en Navidad y conocerle y seguirle en sus primeros pasos, es para nosotros un motivo de alegría y de compromiso cristiano.
5.2. Con estos números (salen diversos niños o jóvenes con carteles en su pecho o espalda –del 1 al 10) queremos reflejar nuestro apoyo a Jesús en su Bautismo: también nosotros queremos ser de su equipo, queremos llevar su mensaje a nuestras familias, colegio, amigos, parroquia.
5.3. El pan y el vino, que luego serán cuerpo y sangre de Cristo, son el alimento de los que tenemos, como Jesús, una gran misión: vivir y hacer vivir, descubrir y llevar el amor que Dios nos tiene.
6. ACCIÓN DE GRACIAS
YO SOY DE LOS TUYOS, SEÑOR
Desde el día de mi Bautismo
en el que, Dios, me hizo hijo suyo
Cuando hago algo por los demás
y no sólo miro por mí mismo
Cuando escucho tu Palabra
y siento que Dios me habla con palabras de amor
Cuando, sabiendo que soy débil,
miro al cielo para que Dios me ayude
YO SOY DE LOS TUYOS, SEÑOR
Si no dejo que, nada ni nadie,
me aleje de Ti
Si hago el bien a los que me rodean
aunque algunos les parezca poco o nada
Si, como Tú, Señor,
me dejo llevar de la mano del Padre
Si, allá donde hablo y camino,
soy semilla de verdad, de justicia y de perdón
¿SOY DE LOS TUYOS, SEÑOR?
Dame tu Espíritu para que, así,
no se apague en mí
lo que Dios en el día de mi bautismo
me regaló con tanta fuerza y amor:
su presencia.
Amén.
viernes, 5 de enero de 2018
Por las minorías religiosas en Asia – Enero 2018
En este vídeo, el Papa pide que todas las religiones, también las minoritarias, encuentren la libertad que a veces hoy no tienen en el continente asiático.
jueves, 4 de enero de 2018
LOS REYES MAGOS REPARTEN JUGUETES EN LA PARROQUIA
LOS REYES MAGOS VISITAN A LOS NIÑOS ENFERMOS EN EL HOSPITAL SAN PEDRO DE LOGROÑO

Los Reyes Magos llegan a la Parroquia San Pío X de Logroño Juguetes, libros y caramelos para los niños de 50 familias del Barrio de La Estrella.

martes, 2 de enero de 2018
“Conócete a ti mismo”…

1.- Introducción.
Señor, ciertamente no soy digno de tu Amor, ni de ser tu discípulo, ni de que me trates con tanto cuidado, con tanta solicitud, con tanto mimo. Por eso te pido ilumines este tiempo de oración para que sepa quitar de mi corazón todo aquello que me separe de Ti. Háblame Señor, te escucho.
2.- Lectura reposada de la Palabra: Juan 1, 19-28
Éste es el testimonio que dio Juan el Bautista, cuando los judíos enviaron desde Jerusalén a unos sacerdotes y levitas para preguntarle: “¿Quién eres tú?” Él reconoció y no negó quién era. Él afirmó: “Yo no soy el Mesías”. De nuevo le preguntaron: “¿Quién eres, pues? ¿Eres Elías?” Él les respondió: “No soy”. “¿Eres el profeta?” Respondió:”No”. Le dijeron: “Entonces dinos quién eres, para poder llevar una respuesta a los que nos enviaron. ¿Qué dices de ti mismo?” Juan les contestó: “Yo soy la voz que grita en el desierto: ´Enderecen el camino del Señor´, como anunció el profeta Isaías”. Los enviados, que pertenecían a la secta de los fariseos le preguntaron: “Entonces por qué bautizas, si no eres el Mesías, ni Elías ni el profeta?” Juan les respondió: “Yo bautizo con agua, pero en medio de ustedes hay uno, al que ustedes no conocen, alguien que viene detrás de mí, a quien yo no soy digno de desatarle las correas de sus sandalias”. Esto sucedió en Betania, en la otra orilla del Jordán, donde Juan bautizaba.
3.- Qué dice el texto.
Meditación-Reflexión
El hombre es un ser que hace preguntas. Los niños aprenden preguntando ¿qué es esto? Pero, de mayores, debemos hacernos todos, esta gran pregunta: ¿quién soy yo? Los griegos solían decir: “Conócete a ti mismo”. Y es el propio Sócrates el que comenta este texto al joven Alcibíades: “Para conocerte a ti mismo no basta conocer tu cuerpo: Tienes que conocer el alma de Alcibíades. Y no llegarás a conocer tu alma si no conoces esa pequeña “centella de divinidad” que hay dentro de ella. Es verdad que toda persona está hecha a imagen y semejanza de Dios, pero esto no debe hacernos orgullosos ni altaneros, al contrario. Normalmente, cuando nos preguntan por nosotros, solemos contestar poniendo por delante nuestros títulos: soy el Sr. Ministro, el Sr. Obispo, el Sr. Alcalde, el Sr. Párroco… Pero Juan contestaba: “Yo no soy”… ni profeta, ni Elías, ni el Mesías. Soy la voz de otro, soy el que da paso a otro que es más importante que yo. Qué hermosa misión la de Juan: señalar con el dedo a Jesús y decir: ése es el Cordero de Dios que quita el pecado, las esclavitudes, el mal que hay dentro de nosotros. Él es el importante.
Y escuchamos la palabra del Papa:
Nos hará bien hoy, a nosotros, preguntarnos sobre nuestro discipulado: ¿anunciamos a Jesucristo? ¿Aprovechamos o no aprovechamos nuestra condición de cristianos como si fuera un privilegio? Juan no se apoderó de la profecía. ¿Vamos sobre el camino de Jesucristo? ¿El camino de la humillación, de la humildad, del abajamiento, del servicio? Y si nosotros encontramos que no estamos parados en esto, preguntarnos: ‘¿Pero cuándo ha sido mi encuentro con Jesucristo, ese encuentro me llenó de alegría?’ Y volver al encuentro, volver a la primera Galilea del encuentro. ¡Todos nosotros tenemos una! ¡Volver a encontrarla! Reencontrarnos con el Señor e ir adelante sobre este camino tan bello, en el cual Él debe crecer y nosotros disminuir. (Cf. S.S. Francisco, 7 de febrero de 2014, homilía en Santa Marta).
4.- Qué me dice hoy a mí este texto. (Guardo silencio)
5.-Propósito: Descubrir el gozo de vivir el día con toda sencillez, como uno más, como uno de tantos.
6.- Dios me ha hablado hoy por medio de su Palabra; y ahora yo le respondo con mi oración.
Necesito ser más humilde, Señor, para permanecer cerca de Ti, conociendo y haciendo vida tu Evangelio. Tú eres la única fuente de la santidad, nada puedo ni debo hacer al margen de tu voluntad. De nada me sirve la fama, el poder, los bienes materiales. Lo único que me debe importar es permanecer unido a Ti para poder realizar la misión que me has encomendado.
Si quieres descargarlo en PDF pincha en el siguiente enlace:
Autor: Raúl Romero
lunes, 1 de enero de 2018
SANTA MARÍA, MADRE DE DIOS

Varios temas se concentran en este día.: La fiesta de Santa María, madre de Dios, el tema de la paz y el estreno del Año Nuevo. María, al estar limpia de todo pecado, vive en un eterno Paraíso. La única que realmente puede decirle a Dios: “Entra, Amor mío, en tu jardín”. La única que puede estrenar un calendario siempre nuevo y sin posibilidad de mancharlo. La única que puede darnos una “paz paradisiaca”. La única que puede decir: Este Niño que llevo en mis brazos, a quien acuno con infinita ternura, es Dios.
Lectura del santo evangelio según san Lucas (2,16-21):
En aquel tiempo, los pastores fueron corriendo hacia Belén y encontraron a María y a José, y al niño acostado en el pesebre. Al verlo, contaron lo que se les había dicho de aquel niño. Todos los que lo oían se admiraban de lo que les habían dicho los pastores. María, por su parte, conservaba todas estas cosas, meditándolas en su corazón. Y se volvieron los pastores dando gloria y alabanza a Dios por todo lo que habían oído y visto, conforme a lo que se les había dicho. Cuando se cumplieron los ocho días para circuncidar al niño, le pusieron por nombre Jesús, como lo había llamado el ángel antes de su concepción. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
1.- El tema de la paz lo abordamos en la primera lectura.
Aquí se nos habla de una de las más bellas bendiciones del A.T. “El Señor te bendiga, ilumine su rostro sobre ti, se fije en ti y te conceda la paz”. María recoge todas las bendiciones importantes del A.T. Las de los patriarcas, profetas, reyes.. Y las mujeres más relevantes como Sara, Rebeca, Judit, Ester, tienen sentido profético. Son importantes porque ellas remitían a María, la madre de Jesús….María, al estar llena de Dios, está llena de paz.. Y de esa paz podemos participar todos sus hijos.
2.- En la segunda lectura se nos habla de la plenitud del tiempo.
Dios envió a su Hijo, nacido de mujer, en la plenitud del tiempo.. Un tema muy aparente para pensar hoy. Con Jesús comienza el verdadero tiempo. No el tiempo cronológico sino el tiempo en plenitud, el tiempo con sentido. Con la venida de Cristo se nos da la oportunidad de dejar el tiempo viejo, el del egoísmo, de las envidias, rivalidades, injusticias…y estrenar un nuevo tiempo, un año nuevo. María, al no estar contaminada por el pecado de Adán, cumple perfectamente el primer proyecto, el primer sueño de Dios sobre los hombres. Es el Paraíso que nunca fue perdido. María es la única criatura que puede decir realmente a Dios con la esposa de los Cantares: “Entra, Amor mío, en tu jardín”. Y come de sus frutos exquisitos.
3.- En la tercera lectura el evangelista Lucas nos presenta a María “guardando todo esto en su corazón”.
¿Qué es esto que guardaba María? El misterio de Dios hecho hombre en sus entrañas. Hace unos años tuve la suerte de visitar Éfeso. En una de las Basílicas, actualmente en ruinas, tuvo lugar el tercer Concilio Ecuménico en el 431. Allí se proclamó a María, Madre de Dios. Las crónicas nos dicen que, mientras los padres conciliares deliberaban dentro del Templo, el pueblo estaba fuera “rezando”. Al conocer la definición… sacaron a hombros a los padres conciliares y con antorchas encendidas iniciaron una procesión llena de aclamaciones a ¡Santa María, Madre de Dios! El Concilio, de ninguna manera, quiso decirnos que María fuera la “engendradora de Dios” de modo que sin ella Dios no hubiera existido. Esto sería una gran herejía. Pero sucede que si el hijo de una pobre mujer llega a ser Ministro, Presidente, o Papa, esa mujer es la madre del ministro, del presidente o del Papa. Como María dio a luz a Jesús -que era Dios- se le llama la madre de Dios. Y esa misma madre nos la entregó Jesús a todos nosotros en la Cruz para que también fuese madre nuestra. Por eso podemos decir llenos de gozo: la madre de Dios es mi madre.
PREGUNTAS.
1.- ¿Estoy convencido de que no puedo vivir en paz sin contar con Dios? ¿Me preocupa el estar yo en paz conmigo mismo para poder dar paz a los demás?
2.- ¿Caigo hoy en la cuenta de la cantidad de tiempo que he perdido en este año pasado? ¿Cómo lo voy a recuperar en este Año Nuevo?
3.- ¿Suelo dar gracias a Jesús por el regalo que nos hizo al morir al darnos por madre a su propia madre?
Este evangelio, en verso, suena así:
Te damos gracias, Señor,
por el don del Año Nuevo:
un árbol con doce ramas
con sabor a olivo viejo.
Entre sus hojas, nosotros
colgamos nuestros deseos
de salud, de paz, de amor,
de los más bonitos sueños.
Pero, sabemos, Señor
que todos nuestros proyectos
fallarán, si no aceptamos
al Salvador verdadero.
Hoy nos lo ofrece su Madre,
Acurrucado en su pecho.
Jesús es para nosotros
Una “bendición del cielo”
Si organizamos la vida
sin Jesús, sin su evangelio,
habremos perdido el año,
habremos “matado el tiempo”
Pero, con Jesús, podemos
sembrar en nuestro barbecho,
trescientas sesenta y cinco
semillas de amor fraterno.
Gracias, Señor, por Jesús,
Salvador de nuestro Pueblo.
En el año dos mil diez y ocho
Será “nuestro amor primero”.
José-Javier Pérez Benedí
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